#NiunaMenos
- El Zoom
- 9 feb 2019
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Mujeres rafagueadas, amordazadas, con un tiro de gracia junto a sus seres queridos: así es el feminicidio que huele a gasolina.
El 5 de febrero pasado, mientras el país recuperaba su ritmo después del primer día de asueto, dos mujeres, mamá e hija, fueron asesinadas por un comando criminal en Irapuato, Guanajuato. Cerca de las 8 de la noche, hombres armados emparejaron la marcha de su auto con los pasos de Soledad Rea, de 45 años, y Perla Adriana, de 19, y les dispararon a quemarropa con armas de alto calibre en la comunidad Carrizal el Grande, por donde pasan ductos de Pemex cargados con gasolina.
Los asesinatos de esas cuatro mujeres —dos adultas y dos menores de edad— en un municipio donde las fugas de crudo son eventos cotidianos dan cuenta de un nuevo tipo de homicidios que ha crecido conforme ganan terreno los grupos de huachicoleros: el "feminicidio por pertenencia del enemigo".
- ¿Qué relación hay entre el robo de combustible en las zonas de dominio de grupos de huachicoleros y las mujeres?
Se ha estudiado desde hace varios meses que no hay un papel de la mujer directamente en el huachicoleo, sino un rol indirecto de víctimas. Por ejemplo, en Guanajuato los grupos criminales tienen tres giros ilegales, principalmente: narcomenudeo, robo a transporte y robo de combustible. Este último creció en los últimos años a partir de los gasolinazos, porque mucha gente prefirió comprar combustible robado y barato.
- ¿Y la sociedad como puede ayudar a frenar este fenómeno?
En el caso específico del huachicol esto se combate no consumiendo combustible robado. Si le quitas la base social a este delito, le quitas todo su poder. Una forma de proteger a las niñas y mujeres más vulnerables es no haciendo más ricos a los criminales.

imagen por Piña Style
por Luz Santos
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